Y cuando el sol me mira con tus ojos
de perro viejo, al cabo
de cualquier quemadura de la vida,
de perro viejo, al cabo
de cualquier quemadura de la vida,
es que sin proponérmelo,
sin cuenta apenas darme
sin cuenta apenas darme
van cayendo las letras del poema
como migas de pan sobre el mantel de un lunes.
como migas de pan sobre el mantel de un lunes.
Cuando me miras tú con esos ojos
ahítos de pecados capitales,
me da por violentar su dulcedumbre
ahítos de pecados capitales,
me da por violentar su dulcedumbre
y rimo amor con vicio
cansancio con asombro
hombría con descaro
y golpe con tu boca
cansancio con asombro
hombría con descaro
y golpe con tu boca
y hasta puedo rimar noche con alas
si es que esta noche quiero imaginarte
si es que esta noche quiero imaginarte
arcángel vengador
o pájaro siniestro
o díptero asesino.
o pájaro siniestro
o díptero asesino.
Porque me estás mirando con los ojos
de muchedumbre tensa y expectante,
los versos se me escapan
subversivos
con tu nombre de Único en los labios.
de muchedumbre tensa y expectante,
los versos se me escapan
subversivos
con tu nombre de Único en los labios.
Después
cuando los cierras y te vas,
fundes mi lucidez con un sólo soplido.
cuando los cierras y te vas,
fundes mi lucidez con un sólo soplido.
Me declaro
incompetente
ante tus ojos.
incompetente
ante tus ojos.
Me declaro incompetente ante tu talento. Felicidades.
ResponderEliminarNo me pareces tú a mí incompetente ante nada, Alfredo, mentiroso. (ríome).
EliminarEres muy amable, muchas gracias.
Namasté.
Maravilloso, encantador y desafiante...hermoso realmente.
ResponderEliminarUn Abrazo!
Fiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiuuuuuuuuuuuuuuuu
EliminarEso es que te gustó, porteño.
Otro para ti.
Namasté.
Quién no, quién no...
ResponderEliminarAnda ya, colega. (ríome)
EliminarIgual te lo agradezco mucho.
Namasté.