Madruga la desgana y en mi calle
no han puesto todavía las aceras,
el hedor de pasadas borracheras
saja el frescor del aire con su dalle.
El vacío se enrosca por mi talle,
tiernas bocas de voces agoreras
inventan agridulces primaveras
y anuncian tu tormenta. Cuando estalle
estruendosa la lluvia, tu sombrero
no ocultará tu rostro, caballero
fingidor de otro pálido Nirvana.
Mi desgana es más grande que tu historia,
no hay nada que salvar salvo la gloria
de no dolerme en tí. Vuelve mañana.
no han puesto todavía las aceras,
el hedor de pasadas borracheras
saja el frescor del aire con su dalle.
El vacío se enrosca por mi talle,
tiernas bocas de voces agoreras
inventan agridulces primaveras
y anuncian tu tormenta. Cuando estalle
estruendosa la lluvia, tu sombrero
no ocultará tu rostro, caballero
fingidor de otro pálido Nirvana.
Mi desgana es más grande que tu historia,
no hay nada que salvar salvo la gloria
de no dolerme en tí. Vuelve mañana.
Querida Morgana ...Gostei muito do realismo que passaste . Com um beijo Pedro Pugliese
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