Para que un hombre sepa que no es hombre,
no hace falta mujer que lo proclame
ni madre que le cuente su mentira piadosa.
Con un espejo basta, uno que no le ame
y le muestre su cara sin luz artificiosa.
Cuando un hombre descubre que no es hombre,
no hay mujer que le salve ni Dios que lo libere
de su difunta hombría,
carga con su fantasma en mudo miserere,
hasta la tumba fría.
no hace falta mujer que lo proclame
ni madre que le cuente su mentira piadosa.
Con un espejo basta, uno que no le ame
y le muestre su cara sin luz artificiosa.
Cuando un hombre descubre que no es hombre,
no hay mujer que le salve ni Dios que lo libere
de su difunta hombría,
carga con su fantasma en mudo miserere,
hasta la tumba fría.
Me dolió, pues me veo.
ResponderEliminarGracias por esta lágrima, para este hombre.
Gracias.
Siempre es duro mirarse con los ojos de ver ¿q no?.
ResponderEliminarGracias a tí por comentar.