Verbigracia
Mirarte y descubrirte encendiendo de nuevo
la lámpara de aceite del verso del futuro,
las palabras manchadas de sangre sugerente
que te inunda la boca cuando absorbes el mundo.
Porque es emocionante decir lo que tú dices
y que amanezca el estro cerrado como un puño
golpeando en el iris de aquella transparencia
que te hizo a mis ojos mujer para un desnudo
integral, fatalista, semilla semoviente
que siembra claridades en eriales confusos.
Hoy como ayer leerte es sentir tus sentidos,
latir como tú lates en tu propio disturbio
y hacer mía tu voz, tu ritmo, tu silueta,
que no se pierde nunca en el mar del absurdo,
porque la libertad que incide en tus palabras
es la que yo persigo con movimientos bruscos.
Como superviviente te exijo que no cejes
y que no te despidas de los tiempos en curso,
que hay mucho que cantar desde tu labio agreste
cuando el poema es amo, tu amante y mi verdugo.
Te dejo mi blog
ResponderEliminarMe has maravillado con el tuyo
Te invito a escribir
Ven y júntate son nosotros
Hay palabras que son como cánticos, que llegan a rozar cada poro de la piel, y se quedan o se buscan. Impregnan la existencia con ciertas notas..., queriendo al "amo, amante y verdugo".
ResponderEliminarPlacer leerte, Morgana, me ha parecido un poema muy hermoso, lleno de matices. Gracias.
Que tengas una muy feliz semana:)