Y así, de golpe, el frío sobre los crisantemos, la lluvia perfumada de resina, la navaja nocturna del aire cortándome los labios y la boba sonrisa de placer.
Así, de golpe, las ganas de mohair sobre la carne, de escuchar la balada del otoño con la mente plegada bajo el cuerpo.
De golpe, así, detenerme un instante en los ojos del tiempo que me miran sin rastro de horizonte, y ser, por una vez, mi gran amor, hasta que al fín la muerte nos separe.
Muito lindo Morgana Minha Espanhola querida..Amei este teu post ...tocou-me muito com um grande e suave beijo Pedro Pugliese
ResponderEliminarSe le viene el otoño encima a la española, querido, y aquí pasamos del bikini al abrigo casi sin transición (ríome).
EliminarGracias por estar, Pedrito.
Un beso para tí.
POR MUY LARGO QUE SE SIENTAN LOS TIEMPOS, SIEMPRE SERÁN EFÍMEROS.
ResponderEliminarUN ABRAZO
Todo depende de la condena, y de la perspectiva humana sobre el tiempo, que vaya usted a saber por qué parámetros medimos. Supongo que los del envejecimiento y claro, no deja de ser una osadía más de las muchas que tenemos.
EliminarMe alegra verte.
Otro abrazo para tí.