Airakhenazi



Si tú no fueras tú
el del correccional de pájaros,
no serían los kivus ni somalia
ni irak ni palestina ni israel
ni lejaim ni los alegoritmos
ni hamartía al fín
y no sería, nunca, la justicia en tus manos.

Serías otro
otro
dándole gusto a todas las que dicen amarte
y quieren protegerte de tu esencia
testimonial y árida.

Seguro que serías muy distinto
y con tanto esponsal
y tanta amante
hubieras devenido en algún maquiavelo
de la molicie erótica sobre la letra errática
que tanto y tanto vende
y tanto te predican.

Si tú no fueras tú
serías siempre el cínico
y otra fuera tu vida y otra tu circunstancia.

Pero tú eres tú
y en tu promiscuidad
tan delicado
que te declaras incapaz de amar
porque nadie se ofenda
aunque todas intuyan la presencia de otras,
y eres de los que evitan
llamarlas por su nombre
no vaya a ser que surja inoportuno
equivocando a la protagonista.

No sé si controlarse en la palabra
pueda ser la virtud que requiere el exceso
ni sé si mentirse a uno mismo
demuestra que es posible
aparentar cordura estando loco
o aparentar locura estando cuerdo.

¿A quién le importa
la última verdad?

Por encima de todo tú eres escritor
y en matrix se desdobla la apariencia.
Todo es imaginario salvo el golpe de sangre
que corre por las venas del futuro.

¿Quién miente de los dos cuando todo es perfecto?
Probablemente ambos.

Cada vez que te exilian e intentan silenciarte
me castigan a mí,
y yo asumo el castigo
porque de lo único
que no me puedes proteger
-bendita tu impotencia-
es de ti mismo.

Después de tanto escrito desde la rebeldía,
tengo, sin duda, lo mejor de ti,
la voz que te define
violento, vulnerable, epidérmico.

Esa es mi cicatriz.
El resto.... aire.

Comentarios

  1. Como dice una robota que yo me sé:
    Faaaaaaaaaaa!!!

    (Le ocurre igual que a mí, la emocíon la deja sin palabras...)

    Magnificus!

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  2. Sí, a veces un Faaaaaa sustituye a la mejor crítica en Ultraversal. Es, un grito de entusiasmo que instauró, precisamente, Aira, y que todos adoptamos por lo expresivo.

    Un beso, Manuel, de robota sonriente.

    ResponderEliminar
  3. Si yo no fuera yo ¿eh? Pero soy yo, y tan así, pero tan así que a veces pienso donde perdí la llave que agarraste para meterte dentro de mi alma.

    Habrá sido tu ganzúa de ángel y me descuido de diablito manso,capaz-.

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  4. Si tú no fueras tú, no sería el poema.
    Y sí, te clavo (ríome). No es más que poder de observación, negro.
    Mirar con los ojos de ver.
    En eso también nos parecemos y mucho ¿q no?.

    Qué gusto verte...

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Antología Ultraversal. Poética del Arrebato. Edit. Libros en Red.

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Este libro es un perfecto ejemplo de cómo autores de diferentes etnias, nacionalidades, costumbres, educación y condiciones sociales pueden llegar, a través de un mismo idioma, a congeniar poética y humanamente desde su particular idiosincrasia. Está dirigido tanto a los lectores amantes de la poesía de nuestro tiempo como a los que se inician en cualquier camino literario, y también a los interesados en la riqueza léxica del español, a los traductores y a todos aquellos que deseen ampliar sus conocimientos sobre la enorme diversidad de idiomática de los países hispanoparlantes. Es una brillante alianza intercultural a través de la palabra como nexo artístico. Un libro de identificación y búsqueda, escrito para abrir puertas y ventanas emocionales de vital sugerencia en las paredes de cada intimidad.

¿Cuántas realidades hay?

¿Cuántas realidades hay?
Neuromante, emocionauta y hasta una broma digital llegado el caso, pero yo que le leo y le siento y me enfrío o me caliento sin posibilidad de escape ante su voz, digo que ahí hay un hombre único que crea realidad y se recrea a sí mismo en la palabra y se define entre lo abstracto y lo concreto y ocurre en mí de la misma forma en que yo puedo ocurrir en él, con la fugacidad de una brutal quemadura que al enfriarse deja una cicatriz indeleble en la piel.La palabra crea la emoción y la emoción es la realidad más pura, más intensa, más exacta del hombre, la que mueve el mundo para bien y para mal.No hay nada que no se pueda expresar cuando se siente, porque, incluso si se tratara de un mero ejercicio intelectual de un autor talentoso, desde el momento mismo de escribirlo está creando la tensión que lo hace real para el que lo recibe y siente al recibirlo. Lo único que podría matar su extrema realidad, sería su silencio.

Nautas

Akhenazi. Espacio a tu costado.