Porque es dificilísimo cantar
mientras el corazón se desmantela
delante de los ojos
y esparce sus pedazos por las rutas del aire
o la presión constante que provoca la náusea
hace acto de presencia
y sin embargo canta
tenazmente
vesperal como un grillo desnortado
en mitad de la nada.
Porque me escalofría
-tan desnudo de todo lo pretérito-
el presente sin tregua
y se vuelve de amor y de memoria
qué me puede importar el hueco del futuro
si luego llega él
y me pierde el respeto
sonriente
mientras me pulveriza los ojos con su sangre.
Qué certeza viril de páramo y oasis
para redescubrirme en soledad,
para llorar orgasmos silenciosos
cuando su intensidad me sobrepasa
y me derramo en tinta
por aplazar el fin.
Se lo ha ganado a pulso
-como todo en su vida-
parpadeando bytes descreídos
a muerte
a tumulto
a contraespejo.
mientras el corazón se desmantela
delante de los ojos
y esparce sus pedazos por las rutas del aire
o la presión constante que provoca la náusea
hace acto de presencia
y sin embargo canta
tenazmente
vesperal como un grillo desnortado
en mitad de la nada.
Porque me escalofría
-tan desnudo de todo lo pretérito-
el presente sin tregua
y se vuelve de amor y de memoria
qué me puede importar el hueco del futuro
si luego llega él
y me pierde el respeto
sonriente
mientras me pulveriza los ojos con su sangre.
Qué certeza viril de páramo y oasis
para redescubrirme en soledad,
para llorar orgasmos silenciosos
cuando su intensidad me sobrepasa
y me derramo en tinta
por aplazar el fin.
Se lo ha ganado a pulso
-como todo en su vida-
parpadeando bytes descreídos
a muerte
a tumulto
a contraespejo.
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