Flechas.



La flecha disparada nunca vuelve
como no vuelve el agua que ha pasado
delante de los ojos ni los besos
que no dimos ni la ocasión perdida.

La flecha desconoce el horizonte
y es ciega al objetivo de la carne.
Ni siente ni padece la premura
del odio que la rige en su trayecto.

Sólo cumple impasible su destino
como una sierva en busca de la diana
que le señale el ojo de su amo.

¿A quién apuntas tú bajo la noche
en que se alzaron mudas las ballestas
y me mataron todos los silencios?.

***

Tú que sí, yo que no. Distintas flechas
de diferentes arcos disparadas
para hacernos pedazos las miradas
y en el espíritu abrirnos brechas.

Sagitas de pasión, tristes endechas
las mías que se pierden alocadas,
aunque las tuyas vuelvan amansadas
por el amor que siembras y cosechas.

Si quieres hacer blanco en medio de mis ojos
recuerda que estoy llena de cerrojos
y dispara tu flecha de furia anticanónica,

porque las que envenena el tonto de Cupido
con su cara de ángel pervertido
causan mayor estrago que la peste bubónica.

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Antología Ultraversal. Poética del Arrebato. Edit. Libros en Red.

Antología Ultraversal. Poética del Arrebato. Edit. Libros en Red.
Este libro es un perfecto ejemplo de cómo autores de diferentes etnias, nacionalidades, costumbres, educación y condiciones sociales pueden llegar, a través de un mismo idioma, a congeniar poética y humanamente desde su particular idiosincrasia. Está dirigido tanto a los lectores amantes de la poesía de nuestro tiempo como a los que se inician en cualquier camino literario, y también a los interesados en la riqueza léxica del español, a los traductores y a todos aquellos que deseen ampliar sus conocimientos sobre la enorme diversidad de idiomática de los países hispanoparlantes. Es una brillante alianza intercultural a través de la palabra como nexo artístico. Un libro de identificación y búsqueda, escrito para abrir puertas y ventanas emocionales de vital sugerencia en las paredes de cada intimidad.

¿Cuántas realidades hay?

¿Cuántas realidades hay?
Neuromante, emocionauta y hasta una broma digital llegado el caso, pero yo que le leo y le siento y me enfrío o me caliento sin posibilidad de escape ante su voz, digo que ahí hay un hombre único que crea realidad y se recrea a sí mismo en la palabra y se define entre lo abstracto y lo concreto y ocurre en mí de la misma forma en que yo puedo ocurrir en él, con la fugacidad de una brutal quemadura que al enfriarse deja una cicatriz indeleble en la piel.La palabra crea la emoción y la emoción es la realidad más pura, más intensa, más exacta del hombre, la que mueve el mundo para bien y para mal.No hay nada que no se pueda expresar cuando se siente, porque, incluso si se tratara de un mero ejercicio intelectual de un autor talentoso, desde el momento mismo de escribirlo está creando la tensión que lo hace real para el que lo recibe y siente al recibirlo. Lo único que podría matar su extrema realidad, sería su silencio.

Nautas

Akhenazi. Espacio a tu costado.